Cargar nuestro iPhone es algo que hacemos (prácticamente) a diario. Y si queremos alargar la vida de nuestras baterías, con sistemas como la carga optimizada de Apple, usando adaptadores con potencia adecuada o usar cables Lightning en buen estado, te vamos a contar algo que, si te pasa, mejor no cargues tu iPhone en un buen rato.
Cuándo no se debe cargar el iPhone
Desde el iPhone X, y a excepción de uno o dos modelos, el resto de iPhone son teléfonos resistentes al agua. A mayor o a menor profundidad, pero no pasa nada si se mojan. De hecho, son sumergibles a poca profundidad. Y aunque el teléfono no muera al instante, como solía pasar en teléfonos de hasta hace no mucho, si tienes un iPhone mojado no debes cargarlo.
¿Por qué no cargar un iPhone mojado? Cuando mojamos o sumergimos el iPhone, el agua se mete dentro del puerto Lightning. El cual, sí, está preparado para el agua. Pero siempre y cuando no haya un flujo de electricidad que circule por él. Por lo que no es lo mismo sumergir un iPhone, que sumergir un iPhone mientras está cargando. (No hagáis lo segundo, por favor.)
Cuando sacamos el iPhone del agua, esta también sale del conector Lightning y, aunque sequemos con una toalla el exterior del teléfono, el acceso al puerto de carga no es de lo más sencillo. Y siempre quedan restos de humedad y gotas de agua, por lo que, tienes que esperar como mínimo unas tres horas antes de volver a cargarlo. Para así, asegurarte de que el puerto Lightning ya está completamente seco y puedas conectar tu iPhone a la corriente, sin que tengan que ocurrir cosas que no queremos.
Incluso si cargamos nuestro teléfono con carga inalámbrica, aunque no usemos el puerto Lightning, es mejor esperar. De igual modo, estamos cargando un dispositivo y no es buena idea cargar un dispositivo que está húmedo o mojado. Ya no solo porque suponga un riesgo para las personas, eso no cabe duda. Pero si hablamos de hardware, tanto el cargador como el iPhone pueden dañarse si por ellos pasa una carga eléctrica mientras hay agua de por medio.
Apple no cubre los daños por agua o líquidos en su garantía
Sí, lo has leído bien. Los iPhone son teléfonos resistentes al agua, polvo y salpicaduras, pero los daños no van a estar cubiertos por la garantía. Así que si tienes un iPhone nuevo y se dañase por culpa de un líquido, tendrías que pagar el coste de la reparación. Y aunque modelos como el iPhone 14 Pro tengan certificación IP68 (la más alta), la propia Apple explica que “la resistencia a salpicaduras, al agua y al polvo no es permanente y puede disminuir como consecuencia del uso habitual”.
Algo muy importante a destacar es que, hasta ahora, hemos hecho referencia a sumergir el iPhone en agua dulce. Pero, ¿Qué pasa si mojo mi iPhone en agua de mar? La respuesta es que debemos aclararlo con agua dulce cuanto antes, especialmente en los botones, la cámara y en el puerto de carga. Y antes de volver a cargar tu iPhone, esperar unas 3-4 horas. El agua de mar, cuando se evapora, deja sal. Y si el agua y la electrónica, ya de por sí no se llevan bien, el agua de mar es aún más corrosiva y dañina para la electrónica. Así que, si has ido a la playa y has sacado fotos bajo el agua, pasa tu iPhone por agua dulce y déjalo secar antes de cargarlo de nuevo, ya sea por cable o inalámbrico.
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